Empresa familiar fundada en 1934, la tradición pasó a sus hijos que han ido aumentando la producción paulatinamente hasta nuestros días. La fabricación se ha ido modernizando pero el proceso artesano implantado por su fundador permanece.

Para su elaboración el primer paso se basa en recoger los mejores orujos de las bodegas, estos se seleccionan y se realiza la destilación de los mismos. El producto resultante es seleccionado en función de la calidad, destinándose a las diferentes variedades de licores y aguardientes.

Los aguardientes de sabores (hierbas, café, etc.) pasan a unos maceradores donde se añaden los diferentes productos naturales, para conseguir los diferentes productos.